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Construcción

El domado de los aros se hace a mano. No uso máquinas para esta tarea. Es un trabajo minucioso de varias horas para ajustar perfectamente las maderas al molde de precisión. De esta forma se consigue una simetría exacta en la caja del instrumento.
Para afianzar la tapa a los aros uso peones de pino y cedro. Esto mejora la vibración de la tapa armónica liberando en forma independiente las distintas zonas excitadas por las cuerdas.
La tapa y fondo se cierran ajustándolos con cuerda, logrando presión justa en todos los puntos de contactos entre estos y los aros para un afianzamiento perfecto. Los adornos de fondos, aros y pala los realizo en diversas maderas, contrastando con algunos encastres en nácar y hueso para hacer de cada guitarra una obra única.
Los mangos los realizo en Cedro, Raulí o Arce. Siendo una pieza vital del instrumento por requerir estabilidad y firmeza, recurro a maderas que aseguran un estacionamiento no menor a 20 años cumpliendo con esas condiciones. El encastre del mango con la caja lo hago en cola de milano.

Selección de tapas

Construcción de la roseta Keller

Esta es la forma en que elaboro las rosetas artesanales para todos mis instrumentos. Es una tarea muy laboriosa y gratificante a la vez. El diseño está inspirado en la yarará, que habita las costas y esteros del río Paraná que baña mi ciudad, San Nicolás de los Arroyos.